viernes, 12 de febrero de 2010

Punto. Raya - Coma,

La delgada línea que separa la estabilidad de la locura. La cordura desatada. El delirio hecho un lío de lana. La facilidad de complicarse. La simplicidad más simple. El grano de arena más diminuto hecho piramide. Y tú tambaleandote en la cima, indecisa, ¿por qué ladera me dejo caer, por cuál me deslizo?. ¡Qué divertido! Ahora hay nieve en el desierto. Todo es posible. Nada es seguro. Sólo sé que no sé nada. Y el que nada no se ahoga.
A veces estoy a un lado de la linea, izando mi bandera, ondeante con el viento, sonriente; otras me tropiezo con esa línea fronteriza y caigo dando una triple voltereta con salto mortal a una piscina de interrogantes. ¡Splash! Y me encuentro nadando a modo mariposa, desordenando mis neuronas, desparramándolas. Tengo un stock de neuronas. Neuronas acumuladas. ¡Se venden, se venden!
Vivo de alquiler en una enajenación y no llego a fin de mes.

30 de Mar de 2009

He conseguido, después de mucho tiempo, una estabilidad mas o menos permanente. Un estado que se prolonga en el tiempo. Una risa notable, una sonrisa sobresaliente. Y en mi interior la armonía fluye por mis arterias; visita un cerebro que ya no está engañado. Mis ojos dan los buenos días al mundo, mis pies están preparados para saltar de charco en charco, refrescándo mis ideas. Tanto tiempo esperándote aquí. No has traído flores, las he plantado y regado yo misma. Es cierto que en mi cama falta tu aliento, pero qué importa! No voy a darle patadas al tiempo para que avance y salga a tu encuentro. Me quedan brazos para abrazarme y motivos para levantarme con el pie derecho.
El mejor sentimiento.

Without sense: 18 de Oct de 2009.

Son tantas cosas las que le gustaría explicarte...
Son tantas inquietudes ahí, en su pequeña mente gobernada por interrogantes. Tantos sentimientos aflorando de un mismo corazón. Tantas sensaciones percibidas por una misma piel. ¿Oyes cómo suspira? ¿Puedes sentir como se le eriza el vello al sentir de nuevo el frío? Esos ojos...Pierde su mirada en el infinito. En el vacío. Desaparece. Y tú...Yo sé que tú no sabes qué hacer. Tan sólo entra y siéntate a su lado. Coge su mano. Tu calor se irá inyectando en su sangre. Y tal y como el ser humano está hecho, tu calor circulara por su cuerpo hasta llegar a su corazón. A veces un gesto sincero, tan solo un gesto, es mejor cura que una palabra finjida.

Así me veía yo...¿casualidad o premonición?


Así me veía yo. Como quien mira un cuadro; como quien observa una escena con detenimiento intentando averiguar qué pasará después. Yo veía cómo el mar me arrastraba hacia dentro, cómo cada ola conseguía atraparme impidiéndome respirar por momentos. Yo misma me pedía ayuda a gritos; desesperada. Las aguas no me soltaban, se enredaban en mí, o yo me enredaba en ellas. Yo, indiferentemente desde la orilla, miraba cómo aquel reflejo de mí, en aquel espejo tan inmenso, intentaba salir de allí agarrándose con fuerza del aire, poniendo toda su esperanza en algo invisible, en algo etéreo...Decidí dar media vuelta. Mis pies avanzaban alejándose de alli mientras el tiempo y el agua borraban mis huellas y nadie podría averiguar ni ser testigo de que alguna vez estuve allí...

martes, 2 de febrero de 2010

En esta contienda tenemos culpa los dos.

Me duele saber que dentro de tu cabeza piensas lo peor de mí. Perdóname, pero no supe encajar tus necesidades con las mías; igual que tú no supiste escuchar qué era lo que yo necesitaba. No todo estaba perdido, ¿sabes? Pero se me quitaron las ganas de intentarlo sólo con tu actitud. Una relación es el resultado de la suma de dos partes. Y negaste todo de entrada, en vez de intentar mirar la situación con otros ojos. Y vale, quizás soy demasiado independiente, demasiado como para añadirle todavía algo de distancia y miedo. Pero no lo hice queriendo. Quise intentarlo, pero no puedo. Y me dijiste que estaba loca, y que eran caprichos míos. Si tanto me querías, ¿por qué pusiste tantos impedimentos para dejarme el espacio que necesitaba? No te voy a repetir el por qué de pedirte tiempo, sabes cómo es mi vida, a qué la dedico y mis objetivos. Sólo ordenar las ideas, era lo que quería. Pedirte alomejor que las cosas fueran más despacio, por mi "problema" de ser demasiado independiente, no lo sé, porque no me dejaste pensar. Sólo me dejaste actuar mandándolo todo a la mierda porque ya no sabía cómo enfrentarme a tus palabras. Eras tú el primero que me decía que hay mil formas de decir las cosas y tu forma de decirlas lo cagó todo un poco. No te estoy echando las culpas, pero influiste en gran parte. La culpa la tuvo esta loca por intentarlo, como dijimos aquel día. Sabías a qué le tenía miedo, sabías porqué me costó tanto decidirme, pero ahora ya da igual. Ahora bien, una cosa tengo bien clara, yo no he finjido. Te he querido y te quiero ahora. Por mucho que no quieras oírlo ni aceptarlo. Y me duele saber que piensas lo contrario. Me duele no saber nada de tí. Pero no sé que hacer, si hablarte o dejar que pase el tiempo, a ver si eres capaz de ver la otra cara de esta moneda. Sólo sé que si no eres capaz de entenderlo, de reconocer esto que te estoy diciendo, de intentar arreglar esto un poco y no quedar como dos desconocidos, yo ya no tengo nada más que hacer por mi parte.
No quiero que me contestes si es para reprocharme. Piensa bien sobre todo esto. Yo no tengo ningún empeño en llevarme mal contigo, en dejar las cosas así de mal. Yo no te estoy exigiendo nada, sólo que también tengas en cuenta lo que yo siento.